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martes, 15 de octubre de 2019

Matasellos de los Premios Princesa de Asturias 2019

El viernes 18, con motivo de los actos de los Premios Princesa de Asturias, por primera vez, entregados por la princesa Leonor, se emite un matasellos conmemorativo cuya estampación tendrá lugar en la Oficina Principal de Correos de Oviedo, en horario de mañana.

Matasellos de los Premios Princesa de Asturias

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Arte: Peter Brook

Maestro de generaciones y considerado el mejor director teatral del siglo XX, es uno de los grandes renovadores de las artes escénicas, con montajes de alto compromiso estético y social, como fueron en su día Marat-Sade y Mahabharata. Peter Brook abrió nuevos horizontes a la dramaturgia contemporánea, al contribuir de manera decisiva al intercambio de conocimientos entre culturas tan distintas como las de Europa, África y Asia. Brook continúa emocionando de forma intensa a través de puestas en escena de gran pureza y simplicidad, fiel a su concepto de “espacio vacío”.

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Ciencias Sociales: Alejandro Portes

El profesor Portes ha realizado fundamentales aportaciones al estudio de las migraciones internacionales, uno de los grandes desafíos para las sociedades contemporáneas. A través de conceptos novedosos como los de enclave étnico e integración segmentada, ha esclarecido las condiciones bajo las que los flujos migratorios pueden resultar beneficiosos tanto para los inmigrantes como para los países de acogida. Además de sus contribuciones al conocimiento de las minorías en Estados Unidos, ha realizado numerosos trabajos en Latinoamérica y en España, donde ha sido mentor y colaborador de varias generaciones de investigadores. El jurado quiere destacar asimismo sus contribuciones al campo de la sociología económica y al análisis de la economía informal.

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Comunicación y Humanidades: Museo del Prado

El Museo es el símbolo de nuestra herencia cultural común, y con el premio se aprecia la labor de conservación y divulgación de uno de los más ricos patrimonios artísticos del mundo.
En la dedicación y el compromiso durante los últimos 200 años de sus trabajadores, patronos, amigos y público, el jurado reconoce la ejemplaridad de su contribución al desarrollo humanístico de la sociedad pasada, presente y futura.

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Cooperación Internacional: Salman Khan y la Khan Academy

Por la consolidación de un formato original y transformador que ofrece material educativo gratuito, a través de internet, para todas las edades, en cualquier lugar del mundo.
Con una visión pedagógica innovadora, Salman Khan ha ideado un proyecto formativo complementario a partir de su lema “Solo tienes que saber una cosa: puedes aprender cualquier cosa”.
Khan Academy, con más de sesenta millones de usuarios registrados en 190 países ofrece, en más de treinta idiomas, ejercicios de práctica, vídeos instructivos y un panel de aprendizaje personalizado, que permite a los alumnos aprender a su propio ritmo dentro y fuera del aula.

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Deportes: Lindsey Vonn

A lo largo de su carrera, ha destacado por su extraordinaria aportación al mundo del deporte, al ser la mujer con más victorias en la historia de la Copa del Mundo de esquí alpino, además de una excelente trayectoria en los Mundiales y en los Juegos Olímpicos, así como por su capacidad de superación ante la adversidad y por ser ejemplo de deportividad.
Lindsey Vonn destaca también por su compromiso con las generaciones futuras al haber creado una fundación que lleva su nombre en favor del apoyo y orientación de las mujeres jóvenes a través de la transmisión de valores educativos, deportivos y de desarrollo personal.

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Investigación Científica y Técnica: Joanne Chory y Sandra Myrna Díaz

Por sus contribuciones pioneras al conocimiento de la biología de las plantas, que son trascendentales para la lucha contra el cambio climático y la defensa de la diversidad biológica.
Los trabajos de Joanne Chory sobre las respuestas moleculares y genéticas de las plantas a las variaciones ambientales, en particular luz y temperatura, ayudan a comprender y mejorar la adaptación de los sistemas naturales al calentamiento global. De forma complementaria e independiente, las investigaciones de Sandra Myrna Díaz permiten cuantificar la importancia de la conservación de la biodiversidad funcional para garantizar los beneficios que los ecosistemas prestan a la Humanidad. 

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Letras: Siri Hustvedt

Su obra es una de las más ambiciosas del panorama actual de las letras. Incide en algunos de los aspectos que dibujan un presente convulso y desconcertante, desde una perspectiva de raíz feminista. Y lo hace desde la ficción y el ensayo, como una intelectual preocupada por las cuestiones fundamentales de la ética contemporánea. Traducida a más de treinta idiomas, contribuye con su obra al diálogo interdisciplinar entre las humanidades y las ciencias.

Oviedo. Premios Princesa de Asturias, Concordia: Ciudad de Gdansk

Símbolo histórico y actual de la lucha arriesgada por las libertades cívicas en un punto crucial donde el espíritu de Europa consigue renacer una y otra vez frente a la intolerancia o la opresión.
La historia y el presente de la ciudad de Gdansk son un ejemplo de sensibilidad ante el sufrimiento, de solidaridad, de defensa de las libertades y los derechos humanos y de extraordinaria generosidad.

Postal de la ciudad polaca de Gdansk

La ciudad polaca de Gdansk, capital de Pomerania y principal puerto del país, es actualmente la cabecera de un área metropolitana que, junto con las localidades de Gdynia y Sopot, supera el millón de habitantes. Con una historia marcada por su ubicación estratégica en la costa báltica y su pertenencia a distintas entidades y estados, Gdansk –entonces Dánzig, su denominación alemana– se convirtió en una Ciudad Libre bajo el auspicio de la Liga de Naciones por el Tratado de Versalles que siguió a la Primera Guerra Mundial. Con un amplio porcentaje de población alemana, Gdansk acogió la que está considerada como la primera batalla de la Segunda Guerra Mundial, cuando el 1 de septiembre de 1939 el ejército nazi invadió Polonia a través de la península de Westerplatte, frente a la ciudad, donde una escasa guarnición de soldados polacos logró resistir heroicamente en inferioridad de condiciones durante una semana. Gdansk –destruida en un 90 %–, fue integrada en Polonia tras la victoria aliada, lo que supuso la expulsión de sus habitantes alemanes. Décadas más tarde, en la ciudad surgieron los primeros focos de oposición al régimen comunista y en sus astilleros está el origen del sindicato Solidaridad, que se erigió en protagonista del derrocamiento del régimen en 1989 y cuyo líder, el Premio Nobel de la Paz Lech Walesa, fue en 1990 el primer presidente elegido democráticamente desde 1939.

Postal de la ciudad polaca de Gdansk

Convertida en símbolo de la resistencia contra el nazismo y de la lucha por la recuperación de las libertades en Europa, la ciudad de Gdansk conmemoró el 1 de septiembre el 80.º aniversario del inicio de la Segunda Guerra Mundial en Westerplatte, bajo el lema “Unidos por encima de las diferencias, para rendir homenaje a las víctimas y a los héroes y dar testimonio de la escala de la tragedia humana, del heroísmo y del sacrificio”. Considerada una ciudad abierta y generosa, Gdansk ha destacado, desde el restablecimiento de la democracia en Polonia hace treinta años, por su dinamismo económico, apertura, cohesión ciudadana y carácter tolerante, especialmente a través de programas dedicados a la integración de la inmigración y la defensa del colectivo LGTB. De su casi medio millón de habitantes, más de 20 000 son extranjeros, la mayoría refugiados procedentes de países de la antigua URSS, como Chechenia o Ucrania, así como de otras zonas en conflicto, como Ruanda y Siria. En 2016, el Ayuntamiento de Gdansk publicó el documento Modelo de integración de los inmigrantes, que desarrolla un sistema de gestión en las instituciones públicas y organizaciones sociales de la ciudad para facilitar la integración de refugiados e inmigrantes en áreas como la educación, la cultura, la asistencia social, el alojamiento, el empleo y la salud. Además, se constituyó un consejo consultivo, integrado por doce representantes de los inmigrantes y dos refugiados, que se encarga de transmitir a las autoridades locales las necesidades y preocupaciones de este grupo de población. En 2018 Gdansk aprobó el “Modelo para la igualdad de trato” para mejorar las condiciones de los grupos sociales más frágiles.

Postal de la ciudad polaca de Gdansk

El impulso de las políticas sociales desarrolladas por Gdansk se atribuye al que fue su alcalde durante las últimas dos décadas, Paweł Adamowicz, quien estuvo en el cargo desde 1998 hasta su apuñalamiento y posterior fallecimiento durante un acto público en enero de este año. La actual alcaldesa de Gdansk, Aleksandra Dulkiewicz, sustituyó en funciones a Adamowicz, hasta las elecciones anticipadas celebradas el pasado mes de marzo, en las que resultó elegida con un 82 % de los votos. 

Postal de la ciudad polaca de Gdansk



Aldea situada en la vertiente meridional de la sierra del Cuera, a unos 400 metros de altitud, con una población de 98 vecinos y en cuyo entorno se encuentra la cueva prehistórica de la Covadiella, descubierta en 1994 y declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO como parte del arte rupestre paleolítico del Norte de España. En la zona fueron encontradas 14 hachas datadas entre 1700 y 1500 a.C. que se encuentran en el Museo Arqueológico de Oviedo, además de un enterramiento con ajuar funerario conocido como la tumba del gigante de Asiegu por el tamaño de los restos.
En 1999, los vecinos crearon la Asociación Cultural Asiegu XXI para recuperar la conciencia de comunidad y la iniciativa perdida por la crisis del mundo rural. Recuperaron fotografías históricas sobre algunos logros de la comunidad vecinal y las publicaron en calendarios monográficos. Impulsaron la realización de trabajos comunales como la mejora de las infraestructuras del pastoreo o la renovación del tendido eléctrico, el alumbrado público o la traída de agua. Dotó de uso a la antigua escuela como centro social. Mejoraron la red viaria con ampliación de la carretera y la construcción de rotondas y aparcamientos. Se construyeron un polideportivo, un área recreativa, un mirador y bancos con vistas a los Picos de Europa.
Con todo ello, contribuyeron a hacer frente al despoblamiento, al envejecimiento y a la degradación de los valores paisajísticos.
(Información de la web de Los Premios Princesa de Asturias)

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