El sábado 14 de septiembre, de 11 a 14 horas tendrá lugar el octavo matasellos asturiano, con motivo del 325 aniversario de la presencia de las Monjas Clarisas en Villaviciosa, organizado por la FASFIL y la comunidad del Monasterio de la Purísima Concepción.
El monasterio fue fundado el 14 de enero de 1694 por la venerable Madre Francisca de San José. Dos jóvenes de Villaviciosa y una de Gijón deciden encerrarse para vivir de acuerdo a la norma de Santa Clara. Unos años antes, los franciscanos fundaban su convento masculino en lo que hoy es iglesia parroquial y residencia de ancianos. La Comunidad de siete religiosas se dedicaba a la encuadernación de libros y al taller de costura y bordado de ornamentos litúrgicos, hasta que falleció la hermana responsable, y ahora elaboran repostería (pastas, postres y dulces navideños). Ocupan un edificio de la calle Santa Clara desde 1717. En 1936, se desalojó el convento y fue incendiado pero, haciendo honor a su voto de pobreza, las monjas sacaron adelante las cuatro paredes de un caserón desvencijado hasta convertirlo en un convento acojedor y casi cómodo. En los años 70 una importante reforma renovó completamente las instalaciones. El convento sufrió una plaga de carcoma que obligó a cambiar toda el maderamen, en una obra que duró diez largos años y sufragada gracias a los donativos anónimos de toda Villaviciosa.
Para el evento se pondrá en circulación una tarjeta prefranqueada que se podrá conseguir en el monasterio o solicitándola a FASFIL: vidigles@telefonica.net o al teléfono 696574170 de su presidente.
También se pondrán en circulación dos sobres, uno con la imagen del convento y otro con Santa Clara.
(Imágenes e información del matasellos de la web de FASFIL. Información sobre el convento de El Fielato nº 93 de 1994)
Santa Clara de Asís nace en el 16 de julio de 1194, siendo la hija mayor de un matrimonio de aristócratas con título de Condes de Sasso-Rosso. De joven quedó impactada por el cambio radical de Francisco Bernardone al que primero veía como un loco cuyas palabras le parecían inflamadas y sus obras sobrehumanas y después, con poco más de 14 años, le parecen maravillas que la gracia de Dios está haciendo el joven santo.
Sus padres tienen previsto para ella el matrimonio, pero la noche del Domingo de Ramos de 1211 se fuga de casa a la capilla de Porciúncula donde la aguardaban frailes seguidores de san Francisco. Allí, arrodillada ante el Cristo de San Damian renunció al mundo "por amor hacia el santísimo y amadísimo Niño envuelto en pañales y recostado sobre un pesebre", entrando a formar parte dela Orden de los Hermanos Menores de Francisco y pasando a habitar en la pequeña iglesia de San Damián restaurada por Francisco. Las virtudes del carisma franciscano son oración, pobreza, trabajo y alegría. La condición requerida para admitir postulantes en la orden era repartir entre los pobres todos los bienes. No podían recibir donación alguna y se sustentaban con el trabajo y la limosna.
Dos hermanas de la santa y su madre se sumaron también a la orden. Francisco fue jefe de la orden , tanto femenina como masculina, hasta que en 1215 el Papa Inocencio III aprobó la regla con las normas de vida de las hermanas y Clara pasó a ser la abadesa.
Santa Clara murió el 11 de agosto de 1253. El papa Inocencio IV presidió sus funerales y dos años más tarde fue canonizada por Alejandro IV.
