Piedrafita, o Piedrahita, es un lugar de la parroquia de San Julián de Ponte, situado en la carretera AS 18, a 3 km de Tineo, en donde se encontraba la casa de los Álvarez- Caballero, de la que Jovellanos escribe en sus “Diarios”: “Casa de don Eugenio Manuel Álvarez, fiscal de mi consejo, reparada, con un gran escudo de armas. Nada queda, excepto la capilla”.
La capilla, dedicada a San Pelayo, dibuja planta rectangular (4´92 por 6´10 m) orientada al este (69º), con un pórtico configurado por dos paredes laterales que avanzan dos metros desde la fachada principal.
Capilla de San Pelayo de Piedrafita.
Foto: Ángel Bravo Torre, 2003
El edificio cubre a tres aguas con teja árabe sobre cubierta de madera. Los muros, de 57 cm, son de mampostería. La fachada principal está formada por muretes a media altura, barrotera y puerta adintelada. En el muro izquierdo se abre otra puerta de acceso y a 46 cm de ella, un contrafuerte refuerza el paramento.
En 1989 se arregló la capilla y, en 2003, está otra vez en fase de restauración. Rafael Lavandera, hasta fecha muy reciente párroco de Santullano, se encarga de la decoración del retablo. Consta de ático y tres huecos; los laterales, en arco, y el central, trilobulado. Sobre el vano del lado del evangelio se lee en una inscripción: “Se reedificó esta capilla e hicieron imágenes, retablo, doró y pintó uno y otro a costa de Villaperde (pinxit et deuravit)”. La continuación, escrita sobre el arco del lado de la epístola, aparece ilegible.
Las imágenes fueron restauradas en 2003. En el centro, San Pelayo, titular de la capilla; a su derecha Santa Bárbara; y a la izquierda, San Francisco. La foto del interior es del año 2004.
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